El romero es una planta aromática con múltiples beneficios que desde la antigüedad se ha utilizado en la medicina tradicional por sus amplias propiedades para la salud.
En los libros de historia se cuenta que los faraones egipcios solicitaban poner sobre sus tumbas un ramillete de romero para perfumar su viaje al más allá, mientras que los griegos y los romanos consideraban esta planta como un símbolo de regeneración. A lo largo del tiempo, ha sido utilizada como una especie vegetal eficiente para repeler plagas y elaborar infusiones medicinales para combatir epidemias.
Hoy en día, sus usos son aún más variados, con los avances tecnológicos ya podemos encontrar shampoos, aceites, perfumes, cremas, jabones e incluso tintes para el cabello elaborados a base de romero.
La infución de romero posee propiedades que contribuyen a la estimulación del folículo piloso y favorecen la pigmentación del cabello por lo que ayuda a mantener el tono natural, evitando la despigmentación temprana de la fibra capilar.
Al ser un estimulante natural, esta planta contribuye a que la sangre llegue de forma más rápida y eficiente a los folículos pilosos para que se mantengan activos y produzcan cabello cada vez más fuerte y saludable.
Esta planta también presume tener excelentes propiedades antifúngicas, lo qué contribuye con la desaparición de infecciones en el cuero cabelludo. El romero puede evitar que se padezca de caspa u otras infecciones micóticas que pueden provocar zonas escamosas en el cuero cabelludo provocar su caída.
Como ya hemos mencionado en Romero puse infinitas propiedades que ayudan a cuidar la piel. El uso constante de un tónico de Romero puede mantener el cutis firme, combatir la flacidez y las arrugas. Adicionalmente por sus propiedades astringentes ayuda con el control de grasa y la aparición de brotes de acné.
El romero es considerado carminativo, digestivo y antiespasmódico, también tiene propiedades coleréticas, colagogas y hepatoprotectoras, lo que contribuye a la buena digestión y a la producción de los jugos gastrointestinales, eliminando posibles espasmos y favoreciendo las secreciones.
Adicionalmente está comprobado que esta planta también ejerce un efecto diurético, antiinflamatorio y antioxidante, ejerciendo un efecto protector de las membranas celulares y captando los radicales libres que favorecen el envejecimiento prematuro.
Para esta receta solo vas a necesitar dos ingredientes: tres cucharadas de hojas de romero secas o tres ramas de romero fresco y dos vasos de agua.
En un recipiente, preferiblemente no metálico, vas a colocar los dos vasos de agua para ponerlos a hervir, cuando el líquido entre en su punto de ebullición deberás apagar el fuego y añadir el romero. Luego deberas tapar el recipiente y dejarlo reposar por 10 minutos para colar la infusión y esperar a que se enfríe.
Una vez fría la mezcla ya podrás proceder aplicar tu tónico tanto en el cabello como en la piel y disfrutar de sus múltiples propiedades. Recuerda que para que funcione el uso debe ser constante aproximadamente unas dos o tres veces por semana.